lunes, 9 de abril de 2012

Análisis de errores


Análisis de errores:

Análisis de errores
Corriente de investigación que se desarrolló durante los años 70 del siglo XX como una rama de la Lingüística aplicada. Se proponía el estudio y análisis de los errores cometidos por los aprendientes de segundas lenguas para descubrir sus causas y conocer las estrategias que utilizan los alumnos en el proceso de aprendizaje.
El análisis de errores surgió como alternativa al análisis contrastivo. En 1967 S. P. Corder presentó uno de los artículos fundacionales de esta corriente«The significance of learner's errors». Hacia finales de los años 70 del siglo XX, la teoría evolucionó hacia los estudios de la interlengua y la adquisición de segundas lenguas.
A diferencia del análisis contrastivo, el método seguido por el análisis de errores no partía de la comparación de la lengua materna y la lengua meta del aprendiente, sino de sus producciones reales en lengua meta; tomando éstas como punto de partida, se procede mediante los siguientes pasos, recomendados en 1967 por  S. P. Corder:
  1. Identificación de los errores en su contexto;
  2. clasificación y descripción de los mismos;
  3. explicación de su origen, buscando los mecanismos o estrategias psicolingüísticas y las fuentes de cada error: en este punto entra la posible interferencia de la lengua materna, como una estrategia más;
  4. evaluación de la gravedad del error y búsqueda de un posible tratamiento.
Como consecuencia de estos estudios, se observó que los errores reflejaban estrategias universales de aprendizaje. De ahí nace la aportación más importante de esta corriente: el cambio de visión del error. Los errores empezaron a ser considerados como un factor provechoso en el aprendizaje  porque constituían un paso ineludible en el camino de apropiación de la nueva lengua  y eran valorados como índices de los diversos estadios que el aprendiente atraviesa durante el proceso de aprendizaje. De esta última asunción se pasaría al concepto de interlengua.
Desde un punto de vista psicolingüístico, esta corriente se apoyaba esencialmente en las investigaciones realizadas en los trabajos de N. Chomsky (1965) sobre la adquisición de la lengua materna. En esta teoría, la adquisición se concibe como un proceso creativo del niño, el cual, sirviéndose de un dispositivo interno, es capaz de construir la gramática de su lengua materna a partir de los datos a los que está expuesto. Siguiendo este planteamiento, se esperaba un proceso análogo en la adquisición de la segunda lengua.
El análisis del error se ha planteado del siguiente modo: por un lado, se han analizado las
distintas bases cartográficas disponibles para ejecutar el programa (en busca del error
inherente) y, por otro, se ha tratado de expresar el error de truncamiento que se deriva de la
modelización que el programa realiza del trazado, en función de la información cartográfica.

El error inherente es muy difícil de determinar con exactitud, si bien suele ser un error
pequeño; por este motivo, el error de truncamiento se ha calculado independientemente de
los posibles errores de la base cartográfica utilizada.

Todas las medidas experimentales vienen afectadas de una cierta imprecisión inevitable debida
a las imperfecciones del aparato de medida, o a las limitaciones impuestas por nuestros sentidos que deben registrar la información.

El principal objetivo de la denominada teoría de errores consiste en acotar el valor de dichas imprecisiones, denominadas errores experimentales. Dado que el valor de las magnitudes físicas se obtiene experimentalmente por medida (bien directa de la magnitud o bien indirecta, por medio de los valores medidos de otras magnitudes ligadas con la magnitud problema mediante una fórmula física) debe admitirse como postulado físico el hecho de que resulta imposible llegar a conocer el valor exacto de ninguna magnitud, ya que los medios experimentales de comparación con el patrón correspondiente en las medidas directas, viene siempre afectado de imprecisiones inevitables. De este modo, aunque es imposible encontrar en la práctica el valor "cierto" o "exacto" de una magnitud determinada, no hay duda de que existe, y nuestro problema es establecer los límites dentro de los cuales se encuentra dicho valor.

CLASIFICACIÓN DE LOS ERRORES
El error se define como la diferencia entre el valor verdadero y el obtenido experimentalmente.

Los errores no siguen una ley determinada y su origen está en múltiples causas. Atendiendo a las causas que los producen, los errores se pueden clasificar en dos grandes grupos, errores sistemáticos y errores accidentales.

Error sistemático: es aquel que es constante a lo largo de todo el proceso de medida y, por tanto, afecta a todas las mediciones de un modo definido y es el mismo para todas ellas. Estos errores tienen un signo determinado y las causas probables pueden ser las siguientes:

- Errores instrumentales (de aparatos). Por ejemplo el error de calibrado es de este tipo.

- Error personal. Este es, en general, difícil de determinar y es debido a limitaciones de carácter
personal. Un ejemplo de éste sería una persona con un problema de tipo visual.

- Error de la elección del método. Corresponde a una elección inadecuada del método de medida de la magnitud. Este tipo de error puede ponerse de manifiesto cambiando el aparato de medida, elobservador, o el método de medida.

Se denominan errores accidentales: a aquellos que se producen en las pequeñas variaciones
que aparecen entre observaciones sucesivas realizadas por un mismo operador. Las variaciones no son reproducibles de una medición a otra, y no presentan más que por azar la misma magnitud en dos mediciones cualesquiera del grupo. Las causas de estos errores son incontrolables para un observador. Los errores accidentales son en su mayoría de magnitud muy pequeña y para un gran número de mediciones se obtienen tantas desviaciones positivas como negativas. Aunque con los errores accidentales no se pueden hacer correcciones para obtener valores más concordantes con el real, si se emplean métodos todos estadísticos se puede llegar a algunas conclusiones relativas al valor mas probable en un conjunto de mediciones.

CONCEPTOS DE EXACTITUD, PRECISIÓN Y SENSIBILIDAD
En lo que respecta a los aparatos de medida, hay tres conceptos muy importantes que vamos a
definir exactitud, precisión, y sensibilidad.

La exactitud se define como el grado de concordancia entre el valor verdadero y el experimental. De modo que, un aparato es exacto si las medidas realizadas con él son todas muy próximas al valor "verdadero" de la magnitud medida.

La precisión hace referencia a la concordancia entre una medida y otras de la misma magnitud,
realizadas en condiciones sensiblemente iguales. De modo que, un aparato será preciso cuando la diferencia entre diferentes medidas de una misma magnitud sea muy pequeña.

La exactitud implica normalmente precisión, pero la afirmación inversa no es cierta, ya que
pueden existir aparatos muy precisos que posean poca exactitud debido a los errores sistemáticos tales como error de cero, etc. En general, se puede decir que es más fácil conocer la precisión de un aparato que su exactitud.

 La sensibilidad de un aparato está relacionada con el valor mínimo de la
magnitud que es capaz de medir. Por ejemplo, decir que la sensibilidad de una balanza es de 5 mg significa que para masas inferiores a la citada, la balanza no presenta ninguna desviación.

Normalmente, se admite que la sensibilidad de un aparato viene indicada por el valor de la
división más pequeña de la escala de medida. En muchas ocasiones, de un modo erróneo, se toman como idénticos los conceptos de precisión y sensibilidad, aunque hemos visto ya que se trata de conceptos diferentes

ERROR ABSOLUTO. ERROR RELATIVO
Si medimos una cierta magnitud física cuyo valor "verdadero" es x0, obteniendo un valor de la
medida x, llamaremos error absoluto en dicha medida, a la diferencia:

Δx = x – x0

donde en general se supone que |Δx| << |x0|

El error absoluto nos da una medida de la desviación, en términos absolutos respecto al valor "verdadero". No obstante, en ocasiones nos interesa resaltar la importancia relativa de esa desviación. Para tal fin, se usa el error relativo.

El error relativo: se define como el cociente entre el error absoluto y el valor "verdadero":


ε =Δx / x0

En forma porcentual se expresará multiplicado por cien. Cuando indiquemos el valor de una medida de una magnitud, tendremos que indicar siempre el grado de incertidumbre de la misma, para lo que acompañaremos el resultado de la medida del error absoluto de la misma, expresando el resultado en la forma:

x ± Δx

De ordinario, y dado el significado de cota de imprecisión que tiene el error absoluto, éste
jamás debe tener más de dos cifras significativas, admitiéndose por convenio, que el error absoluto sólo puede darse con dos cifras significativas si la primera de ellas es un 1, o si siendo la primera un 2, la segunda no llega 5. En todos los demás casos debe darse un valor con una sola cifra, 3 aumentando la primera en una unidad si la segunda fuera 5 o mayor que 5. El valor de la magnitud debe tener sólo las cifras necesarias para que su última cifra significativa sea del mismo orden decimal que la última del error absoluto, llamada cifra de acotamiento.

Como ejemplo damos la siguiente tabla de valores de distintas magnitudes (en la columna de la izquierda mal escritos y en la derecha corregidos) para poner de manifiesto lo dicho anteriormente.

Valores Incorrectos Valores Correctos                                       Valores Correctos

3.418 ± 0.123                                                                               3.42 ± 0.12
6.3 ± 0.09                                                                                     6.30 ± 0.09
46288 ± 1551                                                                               46300 ± 1600
428.351 ± 0.27                                                                             428.4 ± 0.3
0.01683 ± 0.0058                                                                         0.017 ± 0.006   

Si un valor de medida es leído de una tabla u otro lugar, sin indicación de su error, se tomara como error una unidad del orden de la última cifra con que se expresa.

DETERMINACIÓN DE LOS ERRORES COMETIDOS EN LAS MEDIDAS DIRECTAS
Cuando realicemos la medida de cualquier magnitud deberemos indicar siempre una
estimación del error asociado a la misma. Dado que no conocemos el valor "verdadero" de la
magnitud que deseamos medir, se siguen ciertos procedimientos para hacer una estimación tanto del valor "verdadero" de la magnitud, como de una cota de error, que nos indique la incertidumbre en la determinación realizada. Distinguiremos dos casos bien diferenciados: 

a) Caso en el que se realiza una única medida de una magnitud.
En este caso consideramos que el error absoluto coincide con el valor de la sensibilidad del
aparato utilizado para realizar la medida. De este modo el resultado de una medida lo indicaremos en la forma:
x ± Δx (Δx = sensibilidad)

b) Caso en el que se realizan varias medidas de una misma magnitud.
Con el fin de alcanzar cierta validez estadística en los resultados de las medidas, es muy
conveniente repetir varias veces la determinación del valor de la magnitud problema. Los resultados de las medidas individuales pueden presentarse poco o muy dispersas, en función de esta dispersión será conveniente aumentar o no, el número de determinaciones del valor de la magnitud.

DETERMINACIÓN DEL ERROR DE UNA MAGNITUD MEDIDA INDIRECTAMENTE

La medida indirecta de una magnitud se alcanza por aplicación de una fórmula a un conjunto
de medidas directas, (variables independientes o datos), que las relacionan con la magnitud
problema. Mediante dicha fórmula se obtiene también el error de la medida según pasamos a
explicar. Antes de continuar, debemos indicar que si en dicha fórmula aparecen números
irracionales tales como pi, e, etc., debemos elegir el número de cifras significativas con que deben tomarse a la hora de realizar los cálculos correspondientes, de modo que los errores cometidos al aproximar estos números irracionales no afecten a la magnitud del error absoluto de la magnitud que queremos determinar.

Supongamos que la magnitud F es función de otras magnitudes físicas, estando relacionada
con ellas por F = f ( x, y, z, ...). Supongamos además, que se han realizado medidas de las citadas
variables, x, y, z...; y se han determinado su valor y su error. Para realizar el cálculo del error
absoluto de F, en función de los errores absolutos cometidos en las determinaciones directas de x, y,z.
En este problema se presenta una notable simplificación en el caso en el que la función
considerada sea de la forma:
F = x [exp(a)] ,y [exp(b)], z [exp(c)]...


"Las matemáticas pueden ser definidas como aquel tema del cual no sabemos nunca lo que decimos ni si lo que decimos es verdadero".
Bertrand Russell (1872-1970) Filósofo, matemático y escritor británico..





Bibliografía:


1.    Fernández, S. (1997). Interlengua y análisis de errores: en el aprendizaje del español como lengua extranjera. Madrid: Edelsa.

2.    Santos Gargallo, I. (1993). Análisis contrastivo, análisis de errores e interlengua en el marco de la lingüística contrastiva. Madrid: Síntesis.

1.    Corder, S. P. (1967).  «The Significance of Learners' Errors». En IRAL, 5, pp. 161-170, recogido en Corder, S. P. (1981). Error Analysis and Interlanguage. Oxford: Oxford University Press.

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